MUSOMA
The Climber Dream
Queremos compartir el sueño de cualquier escalador y de esta pequeña comunidad que encontraron en las rocas que los rodean una inspiración para crecer, desarrollarse y soñar. El orfanato Jipe Moyo nos acogió con cariño y no podemos más que devolverles con este tributo parte del amor que nos dieron. Gracias Climbing for a Reason por hacerlo posible y a los voluntarios del proyecto. We want to share the dream of any climber and of this small community that found in the rocks that surround them an inspiration to grow, develop and dream. The Jipe Moyo orphanage welcomed us with love and we can only repay them with this tribute part of the love they gave us. Thank you Climbing for a Reason for making it possible and to the project volunteers.
Cámara/producción/sonido: Carlos de Rivas/Halos producciones
Escrito por: Andrea Cartas
Co-producción/ayudante cámara: C.Padilla
Warehouse of Souls
Carlos de Rivas Photography
Después de contar las horas a través de oscuros mares en barcos compartidos con turistas, los refugiados llegan a menudo al puerto del Pireo en Atenas, llevando montones de mantas, carpas enrolladas y bebés en sus brazos.
Sueñan hacer la ruta a través de Grecia a Macedonia y con suerte, a los refugios percibidos seguros como Alemania y Suecia.
Pero desde que Macedonia comenzó a restringir el acceso de los refugiados - permitiendo sólo unas pocas docenas de sirios e iraquíes cruzar la frontera cada día - se acumuló un exceso en Grecia.
Alrededor de 35.000 inmigrantes están actualmente varados en el país, alimentando temores de que Grecia se está convirtiendo en un gigantesco campo de refugiados -o "almacén de almas", como lo llamó el primer ministro del país, Alexis Tsipras.
El "almacén de almas" de Grecia: "Refugiados atrapados en estadios antiguos, y en el aeropuerto abandonado de Hellinikon"
El aeropuerto se cerró en 2001 y parte de la vasta zona se convirtió en un parque olímpico que, según cifras oficiales del gobierno griego, actualmente alberga a 4.120 personas.
La mayoría son de Afganistán, mientras que otros vienen de Pakistán, Irán y Marruecos.
Se les ha prohibido cruzar la frontera porque se considera que son de países "seguros".
Dentro del edificio del aeropuerto, un mar de tiendas de colores brillantes y mantas baratas cubre todos los pies libres del piso, un hogar temporal para aquellos que han llegado a Atenas, pero que ahora se enfrentan a un futuro incierto.
Como muchos de los refugiados en Grecia hoy en día, están atrapados, no en un refugio sino en un purgatorio de esperanzas descoloridas y sueños rotos.
